Durante décadas, Hollywood fue el centro líder para la producción cinematográfica. Desde entonces, las productoras de cine y televisión han buscado lugares ideales fuera del Estado Dorado para ampliar sus estudios. Tomemos como ejemplo Netflix Studios. La productora compró los estudios ABQ en Albuquerque, Nuevo México en 2018, transformando el humilde sitio de producción de 28 acres y ocho escenarios de sonido en un impresionante complejo de producción de 100 acres, agregando cuatro escenarios de sonido adicionales, tres molinos, dos edificios auxiliares, espacio para oficinas y dos lotes traseros. El proyecto de expansión supuso una inversión de mil millones de dólares, y se tuvo en cuenta cuidadosamente la sostenibilidad con sistemas de almacenamiento de energía solar y baterías en el lugar, calefacción y refrigeración geotérmicas, además de 50 estaciones de carga para vehículos eléctricos. Más de 200 Carpinteros de la Unión trabajaron en el proyecto y lo concluyeron en junio de 2024. Esta expansión del estudio ha hecho posible la filmación de programas de transmisión populares, como la cuarta temporada de Stranger Things.
Los Carpinteros de la Unión ayudaron a construir el complejo de producción cinematográfica de 100 acres en Nuevo México.